Día
trampa o horas trampa según como lo quieras llamar,es lo
mismo.Seguramente muchos de los que entrenáis a diario en el
gimnasio a la hora de realizar una dieta
de definición,
mantenimiento o incluso volumen
(porque en volumen no se debe comer de todo pero de esto ya
hablaremos) habréis oído comentar o leído en revistas, foros o
blogs o incluso lo habréis realizado el concepto del día trampa.
El
día trampa en cualquier dieta no es más que un día o mejor dicho
una comida y una cena en la que el que la realiza se la salta
completamente y se come lo que le apetezca en ese momento, bien sea
un chuletón con patatas fritas, una pizza familiar o una hamburguesa
triple,lo que quiera pero ¿es cierto que el día trampa en la dieta
es bueno?
Por
qué se recomienda el día trampa
Lo
que tenemos que tener claro es que el concepto de día trampa no
sirve para todas las dietas, es decir, existen dietas como la famosa
dieta Dukan, la dieta Atkinson, la dieta de la alcachofa, dieta de la
zona,dieta baja en calorías,etc,etc… En la que no está permitido
saltarse la dieta ni un sólo día.
El
concepto de día trampa se usa en dietas de fitness o en culturismo,
y tal como hemos comentado se basa en comer ese día lo que más le
apetezca a uno, con el fin de sorprender al cuerpo y liberar a la
mente de la presión de tener que comer siempre lo mismo sin poder
caer en otras tentaciones.
Para
muchas personas, este día es toda una liberación y es algo así
como una recompensa por el trabajo bien realizado y por seguir
durante toda una semana una dieta estricta, de acuerdo al objetivo
que se busca en ese momento.
La
clave del día trampa
Seguramente
si habéis realizado cualquier dieta habrá llegado el momento en
que, de repente, se siente una irresistible tentación por algunos de
los alimentos prohibidos. Al principio la dieta se sigue con ganas
porque se tiene un objetivo claro y es fácil decir que no a un trozo
de pizza o una buen Haggen daz,por ejemplo.
Pero
llega un momento que sólo el pensamiento de unas onzas de chocolate,
de unas cuantas galletas chiquilín o un puñado de gominolas te hace
enloquecer y dejar de lado tu objetivo en el acto. Está claro que es
muy difícil decir que no a esas tentaciones.
Para
eso existe el día trampa en la dieta, principalmente, tenemos una
comida y una cena un día de la semana para devorar lo que nos
apetezca, aunque eso sí, lo ideal es realizarlo con mesura y medida
y pecar con litros de alcohol o varias docenas bollos de mantequilla.
La
tentaciones malas queman más grasa
Mucha
gente piensa que eso del día trampa es una locura que se han
inventado los culturistas mediocres para no sentirse fracasados al no
aguantar con una dieta estricta durante el tiempo que sea necesaria,
pero se ha demostrado científicamente que los fallos en la
dieta pueden resultar muy positivos para la dieta en sí.
La
universidad de Tufs en Bostón realizó un experimento con un grupo
de personas a las que se le sometió a una dieta baja en calorías y
descubrieron que el 95% de las personas de ese grupo tenían
tentaciones alimenticias a la hora de realizar la dieta.
Pero
sorprendentemente las personas que más grasa bajaron fueron los que
dentro de esas tentaciones deseaban la comida con más alimentos
nocivos que tenían más grasa y calorías que las tentaciones del
resto del grupo, y sus tentaciones fueron más frecuentes que los que
perdieron menos grasa durante el experimento.
Por
tanto, si a lo largo de una dieta estricta, tenéis deseos de comer
comidas altas en grasas y calorías como pizzas, hamburguesas,
helados o gominolas, quiere decir que es muy probable que la dieta
que estáis siguiendo funcione realmente.
El
día trampa sirve para no caer en la tentación más veces
La
verdad es que tienes que evitar las tentaciones, sí, pero no
siempre. Es obvio que caer en ellas lo mínimo posible es mejor que
caer continuamente y la mejor manera de caer pocas veces es programar
esas tentaciones a un día a la semana en la que te puedes comer lo
que te apetezca: el día trampa.
Si
habláis con los culturistas profesionales más disciplinados os
dirán que ellos hacen un día trampa para que el cuerpo se sorprenda
y así no acumule tanta grasa, y sí es cierto, pero realmente lo
hacen porque así llevan mucho mejor la dieta y les ayuda a ser mucho
más disciplinados el resto de los días.
Tu
cuerpo ese día se sentirá recompensado, creerá que ha llegado el
momento de no tener que reservar la grasa y descansará de almacenar
para los momentos malos. Es algo que tanto mentalmente como
corporalmente será aceptado de una forma perfecta por nuestro
organismo.