La
flacidez es una disfunción cutánea propia del envejecimiento
natural o acelerado, ligado estructuralmente a una menor producción
de colágeno. Los cambios morfológicos que aparecen son consecuencia
de profundas alteraciones en los tejidos debido La obesidad, los
embarazos repetidos, una pérdida de peso muy brusca, la vida
sedentaria...Hay que decir que, aunque no existen los remedios
milagrosos ni fórmulas mágicas, sí se pueden seguir una serie de
recomendaciones para vencer a este enemigo de la piel, más conocido
como flacidez, y que se empeña en instalarse en diversas
zonas del cuerpo.La mala
alimentación es otro de los factores que influyen en la aparición
temprana de flacidez,
debido a carencias de proteínas, ya que éstas son imprescindibles
en la formación de los tejidos.
Una
dieta rica en grasas, azúcar y harinas, produce un cuerpo de
consistencia fofa aunque no haya un sobrepeso excesivo.
Las dietas
sin control de estas que pierda X kilos en pocas semanas, que logran
bajadas bruscas de peso, traen como consecuencia que al reducir el
volumen de grasa, la piel que ha perdido elasticidad, quede colgando
o formando pliegues.
Se puede tener flacidez
a edades tempranas por llevar una vida sedentaria ya que la falta de
ejercicio físico lleva a que se pierda masa ósea y muscular.
Las
exposiciones a los rayos solares durante período prolongados, lleva
también a que la piel vaya perdiendo firmeza y ganando arrugas,si no
se hidrata y se tonifica.
Además de estos factores, influye el
tipo morfológico de cada persona, serán más propensos a la
flacidez aquellos de
rasgos redondeados que los del tipo anguloso.
Un rostro que
presenta papada desde joven, perderá firmeza mucho antes que el de
una persona que tenga marcada la mandíbula y el mentón.
Lo mismo
ocurre entre alguien con obesidad y una persona con el cuerpo fibroso
y buena tonicidad muscular, será más propenso a la flacidez
a edades tempranas el primer caso.
Factores
- Cualquiera que sea el tratamiento que se realice se debe llevar una alimentación baja en grasas y reducir los hidratos de carbono,lo primero
- El ejercicio físico es absolutamente necesario para recuperar masa muscular ya que esto ayudará a tensar la piel además de oxigenarla.
- Los ejercicios aeróbicos combinados con la utilización de pesas son excelentes para remodelar y afirmar aquellas zonas que presentan más flacidez, como el abdomen, los glúteos, brazos y piernas.
- El consumo de vitaminas antioxidantes, E, C y A es un aliado importante para cualquier otra técnica, sumado a beber al menos 2 litros de agua por día.
- En el mercado existe gran variedad de productos de cremas reafirmantes que aplicados diariamente, mediante masajes en la zona a tratar ofrecen buenos resultados.
- Si la flacidez es severa existen métodos como la radiofrecuencia que en 10 o 12 sesiones mejoran la firmeza de la piel.
- Otros métodos contra la flacidez son los masajes electrónicos o electro estimulación muscular, mesoterapia, lontoforésis y ultrasonido entre otros. Una técnica muy utilizada es la colocación de hilos tensores, esta debe ser realizada por un cirujano.
- Como ultimo paso para solucionar la flacidez se puede recurrir a la cirugía, mediante una intervención quirúrgica se corta y se retira la piel sobrante.
El
tiempo necesario para que vuelva a la normalidad, acompañado por
ejercicio
físico,
evitando las subidas de peso, es el mejor programa para reducir
la flacidez de la piel.
COMBATIR LA FLACIDEZ
El
ejercicio físico actúa como un poderoso antidepresivo, ya que
incrementa la secreción de endorfinas, sustancias asociadas a la
sensación de bienestar y placer.
Lo
mejor que puedes hacer es comenzar un programa de ejercicio de fuerza
a una intensidad que mediante
el levantamientos de pesas o trabajo de musculación en
máquinas,queme las grasas y endurezca la masa muscular.
Es
necesario que estimules principalmente los músculos de piernas,
glúteos, pecho espalda en ese orden de prioridad. Lo puedes hacer
con ejercicios como Sentadillas, Lunge, Fuerza en Banco, Dominadas en
polea, entre otros.La frecuencia
puede ser de entre tres y cinco veces por semana,puedes pedir
solicitar los servicios de un entrenador personal el cual te haga un
plan personalizado para facilitarte el camino o bien pedir consejo al
monitor de sala para que te oriente o guie en tu rutina de
ejercicios.
A partir de las
seis semanas deberías a comenzar a notar cambios positivos en tu
cuerpo, si es que no has interrumpido el programa por ningún motivo
y llevas un plan nutricional seguido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario