jueves, 20 de diciembre de 2012

El Glucógeno


En nuestra vida diaria y especialmente cuando realizamos con intensidad algún ejercicio, gastamos gran cantidad de energía . El glucógeno es una sustancia de reserva que, en el momento de ser utilizada por el organismo, se transforma en glucosa, que es la principal fuente de energía para nuestras células. Una dieta adecuada, o suplementos nos ayudan a mantener una reserva adecuada de energía para la realización de la actividad física.Se produce fundamentalmente durante esos momentos en que la cantidad de glucosa en las células supera a la cantidad que es necesaria para la produccion de energía. Cuando realizamos con nuestro cuerpo esfuerzo físico, el glucógeno muscular se degrada a glucosa a modo de poder ser empleada como fuente de energía. Sin embargo, como antes dijimos, las reservas son limitadas, muy limitadas y pueden llegar a agotarse. 
La velocidad con que sucede ese agotamiento de las reservas depende de la intensidad que tenga el ejercicio que se ha realizado y de la cantidad de glucógeno que se ha almacenado antes de emprender el entrenamiento o la competición. 




Parte de la energía que absorbemos de la comida (hidratos de carbono) se convierte en glicógeno que se acumula en el hígado (glucógeno-hepático) y en los músculos (glucógeno-múscular). El glucógeno hepático nos interesa menos en el deporte, su función es mantener estable la glucosa en la sangre. 

Nuestro organismo obtiene de la alimentación diaria la energía y nutrientes que necesita para funcionar correctamente cada día, pero al mismo tiempo, dispone de sus propias reservas.
¿Cuantos hidratos de carbono necesito?
Varía en función de la actividad que realizes, y de la intensidad de tu entrenamiento. Lo adecuado es consultar a un experto en nutrición deportiva que valore con exactitud tus necesidades.
No es recomendable utlizar suplementos que aporten hidratos de carbono si realmente no los necesitas, ya que una de las consecuencia podría ser un aumento de peso.


Fuentes de hidratos de carbono


Hidratos de carbono simples o de absorción rápida: 

Son de digestión rápida, de rápida absorción y de rápida combustión a energía. Ejemplo: glucosa o azúcar de la uva, azúcar, miel, fruta fresca y su zumo, fruta desecada (uvas pasas, ciruelas pasas, higos secos...), almíbar, caramelo, jalea, dulces, melaza, chocolate y derivados, repostería, pastelería, bollería, galletería, bebidas refrescantes azucaradas, mermeladas.




Hidratos de carbono complejos: 

Son de absorción lenta, lenta digestión y de lenta combustión a energía. Ejemplo: pan, arroz, pasta, patatas, legumbres, cereales... Deben ser los alimentos más abundantes en la dieta del deportista.


No hay comentarios:

Publicar un comentario